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Bombín, bastón y elegancia de gentleman británico. Aunque Irlanda se le esté hundiendo en el océano, en manos de Complete Bankers. Flema, que es decir cachondeo de fachada impertérrita. Piano o guitarra, y a la segunda canción ya nos hemos olvidado de la ausencia de la orquesta de la divina comedia. Una copa de ginebra, unos dedos de genio y un cerebro peligrosamente juguetón. Y suficiente patilla como para decir en la ciudad del mejor equipo del mundo que su Manchester United es el mejor. Cariñosos abucheos de complicidad culé, y el espectáculo puede continuar con o sin amigos ausentes. No hay distancia imposible en la era de las nuevas tecnologías. Ni canción intocable en el piano de la discoteca indie: ¿os gusta ‘Blue Monday’ o mejor ‘Don’t You Want Me’? Carcajadas, miradas y susurros. Oh Yeah I Like, I Like, I Like. Cathy & Neil. Voz angelical y encantador de masas minoritarias. Manos superdotadas inventando musicales y cabarets. Hipnosis e imbuiciones. Falsete interminable. Humorista espontáneo. Palmas y chasqueos. Orgía lírica en las paredes del Casino. Tonight We Fly, y ya nada podrá hacernos bajar de las sublimes nubes de nuestro pequeño paraíso pop...
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