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Tras el concierto de esta noche, uno tiene la sensación de que los mismos Interpol son los primeros que se dan cuenta de que cualquier tiempo pasado fue mejor. Primero, porqué sólo han tocado las 5 primeras canciones de su último disco (que es el que venían a presentar), y han optado por hacer del show un 'greatest hits' (cosa que la gran mayoría hemos agradecido, la verdad...). Y segundo, porqué escénicamente el show era prácticamente un calco de la gira del 2007, cuando vinieron a presentar 'Our Love To Admire'.
Los neoyorquinos continúan sonando extremadamente compactos y sin fisuras, y a ello también ha contribuído la notable acústica del Sant Jordi Club (mira que voy a conciertos, pero era la primera vez que veía un bolo en este recinto anexo al Palau Sant Jordi). Además, el considerable volumen ayudaba a eliminar a la molesta fauna de cotorras de conciertos, tan común por estas tierras leopardas, y a los que un servidor ducharía gustosamente en napalm. A los que llevan gorritos, rastas o pelos a lo Jackson 5 también los rociaría con un poco de gas mostaza, pero no por nada personal, sino por puro sentido común. Ojo por ojo, egoísmo por egoísmo... a todo esto, el juego de intensas luces (simple, pero muy efectivo), ayuda a conseguir atmósferas por momentos sombrías, por momentos ardientes.
Tras empezar con 'Success', Interpol han ido por faena y a enseñarnos rápidamente que iban a ser generosos con los fans de toda la vida: 'Obstacle 1', 'Length Of Love' y 'Narc' han sido el cheque en blanco que hemos recibido gustosamente. Y a partir de ahí, han ido dejando caer alguna canción nueva ('Lights', 'Memory Serves', 'Barricade'...) entre éxitos de sus 3 discos anteriores ('Mamooth', 'Narc', la celebradísima 'Slow Hands'...). Una hora y 10 minutos en que, Paul Banks (hablando ese castellano mexicanizado que gasta) y el guitarra David Kessler han tenido el protagonismo habitual en los directos del quinteto neoyorquino. Tras un bis de 3 canciones ('NYC', 'Evil' y 'The Heinrich Maneuver'), nos hemos ido para casa con el deja vu de una noche de hace 3 años y 2 días en La Riviera madrileña...
Setlist:
1. Success
2. Obstacle 1
3. Lentgh Of Love
4. Narc
5. Summer Well
6. Rest My Chemistry
7. C'Mere
8. Mamooth
9. Untitled
10. Barricade
11. Take You On A Cruise
12. Lights
13. Slow Hands
14. Memory Serves
15. Not Even Jail
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16. NYC
17. Evil
18. The Heinrich Maneuver
PD: Por cierto, tras el celebrado disco de debut, Surfer Blood han abierto en las dos fechas españolas de Interpol, con un show de escasa media horita pero de sonido impecable. Es verdad que ha habido algún momento que se han hecho algo monótonos, pero me quedo con la intensidad de momentos como 'Twin Peaks', 'Take It Easy', 'Catholic Pagans' o 'Floating Vibes'...
PD 2: Como en el fondo somos así de majos, los leopardos rematamos la noche Interpol y os regalamos un disco de rarezas que encontramos hace un tiempo por la blogosfera. Pura curiosidad para fans....
3 comentarios:
Anda! era uno de mis conciertos indecisos del mes, y al final ganó el no... pensaba lo mismo, ya no son los de antes.
Fui el año pasado o el otro a ver los Sigor Ros allí al anexo, creo que es la única vez que he ido, está un poco perdido el sitio, no me gustan los conciertos allí arriba pero claro para ese aforo no hay nada más...
Sigo sin entender como hay gente que paga entrada para hablar... pero si eso pueden hacerlo en la calle y/u otros sitios y no tienen que desembolsar 40 euros o lo que sea... Pero claro entonces no podrán decir "yo estuve ahí", aunque no se hayan enterado de nada... Es una falta de respeto hacia la gente de alrededor y sobretodo hacia los músicos! Tengo algunos colegas músicos extranjeros y siempre se quejan de lo mismo, del poco respeto de la gente de aquí...
Bueno me alegra que disfrutarais, me voy a escuchar ese regalazo!
Gracias!
No he visto nunca a Interpol, elegí Jesse Malin y Bellrays, por lo que veo elegí bien. Eso si, la próxima espero verlos.
Es un poco coñazo subir hasta allí... y bajar luego! Lo de las cotorras me pone hiperviolento. Prometo que tuve que pararme a respirar y contar hasta 10 para no enviar a una zorra (con perdón, pero no tenía otro nombre) a la Zona Franca de un empujón: no paraba de hablar, de pavonearse con el chico con el que iba sin importarle si estaba dando por culo a los demás... aaggghh!!! Odio visceral me provoca esta gentuza! En fin, disfruta de las rarezas!! :)
A los Bellrays ya les había visto (grandes!) y a Jesse Malin le había visto con D-Generation, pero si no me hubiera coincidido con Interpol, habría ido seguro!!
zarpazos!
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